Desde el pasado 24 de febrero, momento en el que estalló el conflicto entre Rusia y Ucrania, los precios de la luz se han disparado. La electricidad ya venía encareciéndose desde el 2021, pero el inicio de esta guerra ha sido la gota que ha colmado el vaso y los precios ya son casi 10 veces más caros que los de hace un año. ¿Pero por qué afecta tanto una guerra en otros países al precio de la luz en España? En EiDF Solar te lo contamos.
Qué es lo que determina el precio de la luz
En el mercado mayorista, cada día los productores ofrecen ciertas cantidades de electricidad al precio más bajo posible a los demandantes de energía, en función de las necesidades de estos. Tras esto, y como si fuese una subasta inversa, todo el conjunto de la energía se abona al precio más alto que se haya ofrecido, que es lo que marca el coste de la luz al día siguiente. Esos precios de la energía se ven influidos fundamentalmente por 3 factores: la meteorología, los picos de demanda y el precio de las materias primas con las que se genera la electricidad (entre las que se incluye el gas).
Por qué la guerra entre Rusia y Ucrania eleva los precios
Aunque se intente apostar cada vez más por las energías renovables, la realidad es que en la Unión Europea todavía existe una notable dependencia energética de otros países. Para que las centrales eléctricas de ciclo combinado funcionen se necesita importar combustibles fósiles de otros lugares, principalmente gas, que llega desde varios sitios: el norte de África, EEUU y Rusia (que es el proveedor de gas de casi el 40% de la UE).
Las tensiones previas al conflicto ruso-ucraniano ya habían hecho que se limitara la importación de gas ruso, debido a las sanciones económicas impuestas al país, pero esto se ha recrudecido desde el inicio de la guerra. A esta escasez de oferta hay que sumar un aumento de la demanda de gas en todo el mundo, por lo que los precios esta materia prima han subido tanto en Europa como en los mercados internacionales.
¿Y por qué todo esto afecta a España? En nuestro país no tenemos reservas de gas propias por lo que no nos queda otra que importarlo. Aunque el gas que importamos de Rusia supone solo un 9% del total, la electricidad generada en otras centrales europeas (que utilizan gas ruso) también se vierte en nuestro mercado energético. Estos productores de energía sí tienen que asumir el alto precio del gas ruso, además del aumento del valor de los derechos de emisión de CO2, lo que hace que el precio de su electricidad sea mucho más caro. Y como la electricidad se vende al precio más alto que se ofrece, ocurre lo inevitable: los precios de la luz se disparan.
Reduce el impacto del precio de la luz en las facturas de tu empresa
Si tienes una compañía ya llevarás meses notando el encarecimiento de tu factura de la luz. A nivel particular poco se puede hacer para detener el aumento de precios de la electricidad, pero lo que sí puedes hacer para ahorrar es sumarte al autoconsumo. Apostar por la energía fotovoltaica mediante la instalación de paneles solares es la mejor solución para no depender de los precios del mercado. ¡Súmate ya al autoconsumo fotovoltaico y empieza a ahorrar con EiDF Solar!