La factura eléctrica supone uno de los mayores gastos en la economía familiar pero hay formas de evitar que el consumo se dispare y llevarnos un susto a final de mes.
Apunta estos consejos básicos para ahorrar en tu factura eléctrica:
- Revisa la potencia contratada
La potencia contratada supone un coste invariable en nuestra factura. El gasto por estar enganchado a la red eléctrica es fijo. Aunque el consumo sea cero, el coste por potencia será el mismo en cada factura. Pero no todos pagamos lo mismo por término de potencia. Cuanta más potencia, mayor será el gasto. Por ello es necesario saber cuál es nuestra potencia contratada y comprobar nuestro consumo para ver si es posible bajar los kW contratados. Si en tu casa nunca han “saltado los plomos”, ni siquiera cuando hay varios electrodomésticos funcionando, es probable que tengas margen para contratar menos potencia de la que estás pagando.
- Utiliza bombillas de bajo consumo
Optar por bombillas LED podría hacer que ahorres hasta incluso un 75% de energía. Tienen una duración aproximada de 70.000 horas con lo que su vida útil es más larga, logrando el 100% de su rendimiento desde que las enciendes. Además, las LED no contienen ningún elemento tóxico.
- Revisa la instalación eléctrica
Mantener en buen estado el sistema eléctrico doméstico (interruptores, enchufes, conexiones…) puede suponer un ahorro significativo a final de año.
- No dejes en stand-by los aparatos eléctricos
Es lo que se conoce como consumo silencioso, dejar “apagados-pero-encendidos” los aparatos eléctricos. Apagar todo lo que se queda en stand-by (teles, ordenadores, equipos de música…) significa ahorrar un 10% de todo lo que consumes. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) para un consumo medio (3.500 kWh/año) esto supone un ahorro de 52 euros.
Recuerda también desenchufar el cargador del móvil cuando desconectes el teléfono.
- Elige los electrodomésticos de mayor eficiencia
Pueden resultar caros en el momento de la compra pero con el tiempo son más rentables. Es importante escoger aquellos de mayor eficiencia energética (A, A+, A++) que consumen de media un 55% menos de energía.
A la hora de utilizarlos también es importante buscar la eficiencia. Elige los programas que funcionan a temperaturas bajas (al calentar el agua es cuando más consumen).
- Lavadora: temperaturas entre 40ºC y 60ºC implican un ahorro del 40% en luz
- Lavavajillas: los programas Eco funcionan a unos 50ºC
- Frigorífico: cuida bien dónde está instalado (alejado de las fuentes de calor, con espacio suficiente). Es bueno de vez en cuando quitar la escarcha que se produce en su interior ya que esta crea un aislamiento que puede influir en un consumo extra de energía de hasta un 20%. Y cuidado cuando abres la puerta, no la dejes demasiado tiempo abierta.
- Tarifa de discriminación horaria
Otra forma de ahorrar en tu factura de la luz es activar la discriminación horaria en tu tarifa con la que habrá horas en las que la energía es más barata (horas valle) y otras en las que la energía es un poco más cara (horas punta). Muchos consumidores temen contratarla porque a veces no pueden prever el consumo y no quieren arriesgarse a consumir en horas punta, creyendo que la factura de la luz les saldrá aún más cara. Pero la realidad es otra: el 85% de los hogares ahorrarían con la discriminación horaria sin cambiar sus hábitos. Solo es necesario un 30% de consumo en horario valle para sacarle partido a la discriminación horaria.
- Ahorra en calefacción y aire acondicionado
Modera la temperatura del aire acondicionado y de la calefacción. Por cada grado por encima de los 20º, la calefacción consume entre un 5% y un 7% más de energía. En el caso del aire acondicionado, cada grado por debajo de los 25º implica un 8% más de energía aproximadamente.
El Real Decreto 1826/2009 por el que se modifica el reglamento de instalaciones térmicas en los edificios estipula las siguientes limitaciones:
a) La temperatura del aire en los recintos calefactados no será superior a 21 ºC cuando para ello se requiera consumo de energía convencional para la generación de calor por parte del sistema de calefacción.
b) La temperatura del aire en los recintos refrigerados no será inferior a 26ºC cuando para ello se requiera consumo de energía convencional para la generación de frío por parte del sistema de refrigeración.
- Y, por supuesto, apuesta por la energía fotovoltaica
El autoconsumo energético a través de la instalación de paneles solares resulta beneficioso para empresas y hogares. Con el autoconsumo ganarás independencia sobre las compañías eléctricas externas y ahorrarás desde el primer día en tu factura eléctrica. En cuanto empiezan a funcionar los paneles solares tu consumo de electricidad se reducirá drásticamente.
En Eidf Solar ponemos a tu disposición un equipo de ingenieros especialistas en energía solar fotovoltaica para asesorarte en todo lo relativo a tu instalación de autoconsumo doméstico. Solicite ya tu estudio técnico y económico de autoconsumo enviando un e-mail a info@eidfsolar.es o llamando al 900 53 50 37.
