Carlos Saso, director de O&M de EiDF: “Hemos trazado un plan de mejora para el área que se fundamenta en la calidad, la eficiencia y las personas”

Por 21/03/2022Noticias
Carlos Saso, director de O&M de EiDF Solar

Carlos Saso ha asumido recientemente el cargo de director de O&M en EiDF; pero Carlos no es nuevo en la compañía. Tras finalizar sus estudios de Ingeniería de la Energía formó parte del equipo como técnico del departamento de Ofertas hace unos 5 años . Ahora, después de haberse formado en diferentes materias (MBA, Máster en Prevención de Riesgos Laborales) y haber trabajado en Ence como ingeniero de Fiabilidad de Mantenimiento, vuelve a EiDF con un nuevo reto profesional: gestionar la unidad de negocio de O&M para autoconsumo y generación.

¿Cuál es tu función dentro de la estructura organizativa de EiDF?

Se ha potenciado el área de negocio de Operación y Mantenimiento para aportar valor diferencial al cliente tras la ejecución de la instalación, acompañándolo durante la vida útil de la misma.

Por tanto, mi función como director del área es la de encontrar la mejor fórmula para controlar las plantas y aportar soluciones efectivas para la mejora de la disponibilidad de estas. Para ello, nos centramos en el análisis de datos que nos aporta las monitorizaciones y una correcta planificación de los mantenimientos para satisfacer el ahorro esperado por el cliente.

¿Qué objetivos te planteas en el departamento en el corto/medio plazo? ¿Cuál es el reto?

En un entorno tan competitivo y turbulento como el actual es evidente que solamente sobrevivirán las empresas que estén mejor preparadas.

A corto plazo tenemos que valorizar el mantenimiento y mejorar la gestión de la actividad diaria mediante una cuidadosa y disciplinada implantación de técnicas y herramientas para generar rutinas.

Como director del área de negocio me gusta hablar de la visión estratégica a largo plazo y esta no es otra que alcanzar la excelencia en la gestión. Para llevar a cabo esto, hemos trazado un modelo de mejora que se fundamenta en la calidad, la eficiencia y las personas, donde la mejora continua será una parte esencial de nuestro trabajo.

Tras una primera experiencia en EiDF y tu posterior trayectoria profesional, ¿qué te ha empujado a volver?

En su día EiDF me brindó la oportunidad de acceder en el mercado laboral y formarme en el mundo fotovoltaico, por lo que estoy tremendamente agradecido ya que me ayudó a sentar mis cimientos técnicos.

Soy de Pontevedra, siempre he apostado por fomentar el tejido industrial en mi tierra, la sostenibilidad y las energías limpias. EiDF es un referente industrial en la comarca y es una compañía líder en el mundo de la fotovoltaica, así que la pregunta debería ser: ¿Cómo no has vuelto antes? (risas)

¿Cómo ha cambiado EiDF en este tiempo?

Pues el cambio es total sobre todo en dimensión de negocio. El crecimiento ha sido exponencial. En sintonía con este crecimiento se ha mejorado en todos los procesos asociados a la cadena de valor, de ahí la apuesta por reforzar el área de O&M.

¿Qué diferencias hay entre el mantenimiento para autoconsumo y el previsto para generación?

Podemos decir que la finalidad es la misma para las dos vertientes y es la de mejorar la disponibilidad, rendimiento y producción de las plantas. En un caso, supone la mejora sustancial en el ahorro del cliente y, en el otro, aumenta la generación de energía renovable que aportamos a la red.

¿Por qué es importante un correcto mantenimiento de las plantas de autoconsumo y generación?

No existe dudas de que es esencial; no es una cuestión negociable. La instalación está hecha para durar un determinado tiempo y para esto tiene que estar dotada de unos cánones de calidad y cuidados determinados.

¿Por qué apostar por el servicio de O&M de EiDF; cuál es su valor diferencial?

Contamos con un equipo de profesionales competentes que no escatima dedicación, entusiasmo y energía y que, además, cuenta con un “know how” muy potente.

Llevamos muchos años en el mercado fotovoltaico y hemos realizado numerosas instalaciones. Esto nos hace tener la capacidad de conocer de primera mano las demandas de una instalación para que dure lo esperado y tenemos las fórmulas para conseguirlo.

¿Qué tipo de incidencias son las más comunes?

Los principales tipos de avería se pueden categorizar por la causa de la falla, el tipo de componente dañado, el alcance de la avería y cuál es el elemento dañado.

Para atajar cualquiera de estas incidencias hay que poner el foco sobre el análisis de los datos obtenidos en las monitorizaciones, ya que el inversor es el cerebro de la instalación y a partir de ahí dimensionar los mantenimientos adecuados para cada instalación.

A tu modo de ver, ¿cuál es la clave para una correcta gestión de equipos?

Los equipos funcionan cuando tienen clara su función y responsabilidades, su importancia como parte de un todo, y deben contar con una hoja de ruta ambiciosa. De esta forma, se fomenta una identidad y cultura de empresa que impregna de compromiso a todos. Como suelo decir: “los métodos lo hacen posible y las personas lo consiguen”.

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